Cuando tus besos se alzan por la nochesobre las nubesy rozan delicadamente las estrellas,allí estoy yo esperando,sediento,cada gota de tu delicioso sabor.Y el olor de tus pechosvuelve pronto a adormecerme. Cuando tus ojos iluminan el Soly tus pasospercuten las aceras silenciosasque antes transitaba sin rumbo,allí estoy yo mirándote,suspirando,queriendo saber todo de ti. Cuando tu pelo…Leer más K
poesía
Contigo
Se oyen cantos a lo lejos.La gente gira, creo, no sé si dentroo fuera del espacio que ocupan.No hay centro.Y yo, atento, no puedo quejarme.Celos quizá,quizá miedo.Pero no puedo quejarme de nada de nada.El universo sigue a veces destruyendocosas, instantes, lugares, personas.Destruye a su paso todo.Todo lo consume por algún motivo.Pero yo estoy inamovible y…Leer más Contigo
Sueños
Te soñé tanto,tanto te soñé… Te soñé tanto de día como de noche.Despierto y dormido.Te soñé incluso cuando estabasahíenfrente.Mi corazón y el tuyo eran sóloun único pálpito.Entonces,cuando tan cerca te tenía,cuando sabíamos que el futuroy todo lo que se cuenta la gente comúneran feas mentiras.Sí, cuando descubrías mi bocacon las yemas de tus dedos,o cuando…Leer más Sueños
No de ellos
Para AAM Tú no eres de por aquí.No eres la ausencia de la brisaque presuponen tus raíces.No eres el seco parpadeoque destila luz tras los cristales.No eres una estatua sin vida,un trozo de trapo en el suelo,o un mañana que nunca llega.Tú no eres de por aquí:a mí no puedes engañarme.No perteneces a estos lugares,fríos…Leer más No de ellos
El deseo de estar solo
Solo el deseo solo, o el deseo de estar solo, o la ironía del enrredo. Siempre más allá del tiempo, de la cercanía, de puertos tan lejanos, de aparentes amaneceres. Siempre, siempre más allá, como una alucinación o como una promesa incumplida. Como si la lluvia no fuera a parar, ni un segundo, de repicar…Leer más El deseo de estar solo
No soy piedra
Lejos de todo el ruido. Derruido pero no del todo. En el lodo y el sinsentido. Sintiendo, de cualquier modo, pues no soy una piedra.
Selva
Para PM Ni tú ni yo sabíamos que la calle portaba esos ecos de soledad indefinible.Era siempre otro signo más de nuestro amor.Y la Luna, como antes, contemplaba, fría, el atardecer. Sabíamos lo que debíamos hacer:escondernos de la mirada impasible,ser otros, seres altruistas del corazón,navegar entre papeles y sobre nubes.Donde la verdad y la belleza…Leer más Selva
Que nos salva la belleza también
Y es que mi vida se desparrama en mi pensamiento, infectando de sensualidad cada palabra. Y la belleza me da miedo y me escondo y me repliego; a no vivir, a sentir menos. Desciendo a niveles mínimos de existencia. Siento no poder morir a tanta vida (¡grande peligro el movimiento!). No poder cerrar la…Leer más Que nos salva la belleza también